Si bien muchas veces causa temor siquiera pensar en la posibilidad de solicitar préstamo para hacer frente a distintas situaciones que se presentan a lo largo de la vida, en ciertas ocasiones son una gran alternativa que vale la pena tener en cuenta.
No hay un solo caso puntual que amerite considerar solicitar préstamo, ya que hay tantos motivos como personas en el mundo. Por eso es que también existen diferentes tipos de créditos que se ajustan a la gran variedad de razones que puedan motivar su solicitud.
Es importante tener en claro para qué se requiere el préstamo, para poder solicitar el más adecuado para las necesidades en cada caso. Además, no se puede dejar de investigar qué opciones existen y qué condiciones ofrece cada banco.
Los préstamos ICBC se encuentran entre los más convenientes en la actualidad, ya que ofrecen tasas atractivas y planes de financiación que hacen más fácil las cosas al momento de solicitarlo.
Hoy en día son muchos los empresarios o pequeños emprendedores que han solicitado un crédito en ese banco para poder mantener su negocio a flote en medio de la crisis de la pandemia, ya que ofrecía una gran cantidad de ventajas a la hora de devolver el dinero.
Muchos de ellos, pudieron continuar con el pago de los sueldos de sus empleados, gracias a la posibilidad que les otorgó ese banco de contar con la facilidad de tener tres meses de plazo hasta comenzar a devolver el dinero.
Tipos de préstamos
A la hora de solicitar un préstamo, hay que tener muy en claro para qué se necesita el dinero. Esto es porque existen opciones crediticias que son ideales para hacer frente a ciertos consumos, pero no para otros.
De este modo, no será el mismo crédito el que será conveniente pedir si se desea comprar una casa, cambiar el auto, o adquirir nuevos electrodomésticos. Por eso es importante, también, explorar las diferentes opciones que ofrecen los bancos.
Los préstamos personales, por ejemplo, son ideales a la hora de pagar las vacaciones del año, o renovar los muebles del hogar, o comprar nuevos electrodomésticos. Quienes más conocen de finanzas suelen decir que conviene pedir este tipo de préstamos, antes que pagar en cuotas con tarjeta de crédito.
A la hora de comprar una casa, en cambio, los créditos hipotecarios UVA son la mejor opción, ya que, a diferencia de los tradicionales, tienen sus cuotas ajustadas a la inflación, lo cual las hace más accesibles.
Si bien en países como Estados Unidos los créditos hipotecarios funcionan bien, y son una de las opciones más elegidas para adquirir una vivienda, en países con alta inflación como la Argentina, no funcionan. Esto es porque, por temor a perder dinero, los bancos establecen cuotas altas que sean más altas que la inflación.
Al estar los créditos UVA atados a la inflación del Banco Central, siempre se tendrá la seguridad de que el aumento de sus cuotas se ajustará mensualmente acorde a ese porcentaje.
Para quienes estén considerando cambiar el auto, existen dos tipos de préstamos disponibles: el leasing y los créditos prendarios. Elegir uno u otro, dependerá de si el auto en cuestión es nuevo o usado.
En el primer caso, se puede optar por ambas opciones. El leasing consiste en la financiación de hasta la totalidad del valor del vehículo, con ciertas ventajas impositivas, haciendo posible adquirirlo al finalizar el plazo acordado.
Los créditos prendarios, también sirven para quienes deseen comprar un auto nuevo, aunque también son los adecuados para comprar uno usado. Este tipo de créditos permiten financiar un alto porcentaje del valor del vehículo en una gran cantidad de cuotas. Los números, por supuesto, serán diferentes dependiendo del banco en cuestión.