Este martes confirmaron la peor noticia: finalmente el cuerpo hallado anoche en el kilómetro 434 del río Paraná pertenece a Sergio Carrizo, el trabajador municipal de Villa Gobernador Gálvez que estaba desaparecido desde el miércoles por la noche, cuando cayó desde la costanera baja de San Lorenzo mientras estaba en un Peugeot 207 acompañado por una mujer llamada Cintia Ramírez que sí logró salvar su vida.
Ayer cuando caía el sol lograron rescatar el cuerpo de Sergio Carrizo a la altura de Granadero Baigorria. Lo llevaron a tierra desde la Reserva Natural de dicha localidad, a la espera de que fuera identificado por familiares. De allí lo trasladaron al Instituto Médico Legal para la realización de la correspondiente autopsia, solicitada por la fiscal del caso Melisa Serena.
Luego de cinco días de estricto silencio, el lunes hablaron por primera vez familiares de Sergio Carrizo. “Mi hermano era muy precavido y siempre íbamos a tomar mates a orillas del río. Era muy detallista y no corría riesgos en nada. Yo lo único que sé es que no me cierra nada. Absolutamente nada de lo que dice esta chica Cintia. Cambia su versión una y otra vez y de los hechos”, manifestó Liliana, hermana de Sergio.
“Tampoco me explicó por qué ella salió ilesa”, prosiguió la hermana del hombre desaparecido. “Dicen que a ella le dieron el alta a las 4 de la madrugada. Si eran novios, ¿por qué ella no volvió? ¿Por qué se fue y no volvió a dar más la cara? Mi hermano no sabía nadar, pero ella dijo que habían llegado a la orilla. ¿Adónde está mi hermano? Yo quiero saber qué pasó con Sergio”, enfatizó Liliana.
En medio del hermetismo de la fiscal Serena, otro de los familiares que ofreció valioso testimonio de lo sucedido fue Fabricio, el hijo de Sergio Carrizo. “Esta mujer Cintia declaró que cuando el auto se cayó al río, los dos salieron por la ventanilla del acompañante. Ella declaró que no sabía nadar, al igual que mi viejo”, contó.
“Cuando lo saca a mi papá por la ventanilla, sobre ese momento Cintia declara que mi viejo no podía nadar y le pedía que se calmara. Ella lo sostenía y como pensó que lo estaba ahogando, lo soltó. Declaró que lo agarró de nuevo pero que después lo volvió a perder a mi padre”, precisó Fabricio sobre lo ocurrido el pasado miércoles por la noche.
En cuanto a la declaración ambigua de la acompañante de Sergio aquella noche, Fabricio expresó que “ella dijo que lo veía flotando hasta que llegó a la orilla. Lo que me contó la fiscal fue que el auto estaba en contacto y con la calefacción prendida. También lo que declaró Cintia fue que el vehículo estaba en cambio y con el freno de mano puesto. No nos explicamos todavía por qué el auto avanzó y terminó en el río”.