Luego de cinco años en carpeta, la provincia de Santa Fe finalmente reglamentó la Ley N.º 13.932, una norma fundamental para la conservación, uso sostenible y protección de los humedales santafesinos. La medida, anunciada este martes, representa un paso decisivo para la gestión ambiental del territorio y convierte a Santa Fe en la segunda provincia del país, después de Misiones, en contar con una legislación específica y reglamentada sobre estos ecosistemas.
La normativa, impulsada y elaborada por el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático, fue aprobada por el Gobierno provincial y contempla herramientas concretas para la protección de los humedales, entre ellos tres sitios de importancia internacional reconocidos por la Convención Ramsar: Jaaukanigás, Laguna Melincué y el Delta e Islas del Paraná.
Uno de los aspectos centrales de la reglamentación es la implementación de un Plan de Monitoreo Ambiental, que permitirá realizar una evaluación continua del estado de los humedales, incluyendo parámetros físicos, químicos y biológicos sobre el agua, el suelo, la flora y la fauna.
Además, todos los proyectos que puedan afectar el ambiente estarán obligados, desde ahora, a presentar un estudio ambiental y gestionar la correspondiente factibilidad ambiental, en cumplimiento con la Ley 11.717 y el Decreto 153/25.
La reglamentación también impulsa la ampliación del Sistema de Áreas Naturales Protegidas, que ya incorporó más de 1.100 hectáreas en el último año, y trabaja en la consolidación de corredores biológicos y la inclusión de reservas privadas.
Por último, la ley formaliza el Inventario Provincial de Humedales, una herramienta clave para identificar, clasificar y caracterizar los diversos ecosistemas húmedos de la provincia.
Con esta reglamentación largamente esperada, Santa Fe da un paso firme hacia una gestión ambiental más eficiente, en un contexto donde la protección de los humedales es cada vez más urgente frente a los efectos del cambio climático y las presiones del desarrollo productivo.
