Un jubilado de la Municipalidad de Puerto San Martín que vivía sólo en el una casa en la localidad de Andino fue hallado muerto cuando dos mujeres que solían tener contacto con él denunciaron a la comisaría local que Leguizamón llevaba varias horas sin contestar su teléfono celular.
Cuando los efectivos entran en la vivienda se encontraron con el hombre sin vida y con rastros que en el lugar había habido una pelea que terminó con la víctima apuñalada en la zona del cuello. Una vez con el fiscal Balbis en el lugar comenzó la investigación para poder dar con el asesino. El primer elemento que llamó la atención al fiscal fue un cuchillo tipo Tramontina con mango rosa y un cuchillo de carnicero, el primero no parecía pertenecer a la víctima.
La casa está en el mismo lote que otra morada que es usada como fin de semana por una mujer de Granadero Baigorria, este dato también fue clave para dar con el asesino. El fiscal encontró en el alambrado que divide la dos casas una mochila que tenía unas sandalias Crocs y una remera, no tenían relación con un hombre de 67 años de edad. Es por este hallazgo que Balbis pidió entrevistar a la vecina del lugar que mostró resistencia para brindar información. La mujer fue esquiva antes las primeras consultas situación que se sumó a diferentes denuncias que el fiscal empezó a recoger en los sistemas judiciales sobre los antecedentes del hijo de esta mujer y testimonios de vecinos de la zona.
El fiscal ordenó que la policía encuentre al hijo de esta mujer Samuel C. de 25 años de edad, que según ella misma estaba en situación de calle en la ciudad de Granadero Baigorria. La mujer fue consultada si presentaba heridas quien aseguró que no pudo ver “porque tenía la manos en los bolsillos”. Los efectivos lograron dar con el joven que una vez detenido pudieron constatar en la revisación médica que tenía cortes muy profundos en ambas manos, cortes que coinciden con el cuchillo de carnicero que manipulaba la víctima al momento del ataque.
Por otro lado y con la evidencia incontrastable la madre de Samuel se quebró y declaró que la casa que usaban para fin de semana tenía pisadas de barro y sangre, el fiscal investiga si el joven después de cometer el asesinato se acostó a dormir y se escapó en la mañana en el auto de la víctima que aún continúa desaparecido.