Gerardo Martínez, el titular de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) inició conversaciones con la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) en pos de renegociar los aumentos de salarios convenido meses atrás.
Es que el índice inflacionario empuja a la conducción sidncial a revisar antes de lo previsto todo lo pactado.
“El salario no puede perder contra el proceso inflacionario”, argumentó el líder de los obreros de la construcción y uno de los gremialistas con más peso dentro del círculo del presidente Alberto Fernández.
A comienzo de mayo, la Uocra firmó con los empresarios un incremento de haberes en torno al 62 por ciento, pagadero en ocho tramos y con una cláusula de revisión prevista originalmente para noviembre.
Según el acuerdo vigente, el próximo incremento debe ajustarse en el mes en curso con una suba de 8 por ciento, y otro porcentaje similar se previó para septiembre y octubre. El resto fue pactado para enero y febrero con 5 por ciento para cada mes.
De acuerdo a lo revisado puertas para adentro, la Uocra no desea quedar atrás en los ajustes salariales, impulsado por la suba inflacionaria, y para eso el primer paso será acordar con el empresariado. Y de hacer falta, recurrirán a su vinculaciones políticas con el actual gobierno.
