Conflicto entre sindicatos

Uocra levantó el piquete en Cargill y llevó la protesta a los Aceiteros

Uocra levantó el piquete en Cargill y llevó la protesta a los Aceiteros

Temprano manifestaron un reclamo en la cerealera, pero luego llevaron los neumáticos hasta la puerta del gremio en Puerto San Martín
Temprano manifestaron un reclamo en la cerealera, pero luego llevaron los neumáticos hasta la puerta del gremio en Puerto San Martín

Esta mañana a primera hora un numeroso grupo de obreros y militantes de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) instaló un piquete en los portones de Cargill, en Puerto San Martín.

El motivo de la protesta era la falta de adecuación de un grupo de contratados de la cerealera en el convenio colectivo de trabajo de la construcción. Tras algunas horas de piquete, en los que se impidió el ingreso de camiones con granos, se reunieron con los empresarios y luego levantaron la medida de fuerza.

Es que desde la multinacionales les explicaron que ese mismo grupo de empleados eran requeridos por el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) del departamento San Lorenzo, y que el mismo reclamo ya lo había expuesto la comisión directiva que ahora encabeza Daniel Succi.

Los sindicalistas de la Uocra, entonces, cambiaron el objetivo de su protesta y montaron neumáticos para un piquete en las puertas del mismísimo SOEA, sita en calle Tucumán y a metros de la Avenida San Martín. Sin embargo no llegaron a encenderlos fuego porque hay una convocatoria que lanzó el Ministerio de Trabajo de la Nación para reunir a las partes y evitar males mayores.

En conclusión, los de Uocra fueron a protestarle a Cargill para que reconozca su convenio en un grupo de obreros que revestían en calidad de contratados, pero se enteraron, de boca de los empresarios, que ese mismo pedido ya lo habían efectuado desde SOEA y que con ellos ya habían iniciado negociaciones.

Cuando el líder obrero de la construcción local, Carlos Vergara (que integra la conducción nacional del gremio), se enteró de los sucesos, no lo dejó pasar y mandó a su gente a las puertas del sindicato colega. Algo así como dirimir “quien la tiene más larga”, después de entender que quisieron “mojarle la oreja”.