Una situación de extrema preocupación se vivió anoche en San Lorenzo, cuando una adolescente de 16 años abordó un vehículo tipo Uber sin autorización familiar y emprendió viaje hacia la localidad cordobesa de Isla Verde. El auto fue finalmente interceptado por la Policía Caminera de Córdoba tras varias horas de búsqueda coordinada con la Policía de Santa Fe.
Todo comenzó cerca de las 22:45, cuando la madre de la joven, Dámaris F., llamó desesperada al 911 después de que un familiar la alertara: su hija había subido a un Renault Megane gris en la esquina de Lavalle y Liniers, presuntamente rumbo a Córdoba, donde reside su ex pareja de 18 años.
La mujer afirmó que jamás autorizó el viaje, y que desconocía por completo la intención de fuga.
Minutos después, la Policía entrevistó a una amiga de la menor, quien admitió haber sido ella quien solicitó el Uber “a pedido” de Dámaris. Cuando los agentes intentaron comunicarse al celular de la adolescente, no hubo respuesta.
A través del chat de la aplicación, la Policía exigió al conductor —identificado como Carlos A.— que regresara a San Lorenzo por tratarse de una menor sin autorización. El pedido fue ignorado y el viaje continuó rumbo a Córdoba.
La situación se volvió más confusa cuando los agentes lograron contactar al joven residente en Isla Verde, supuesto destino de la menor, quien negó haber pactado un encuentro y afirmó que no quería verla.
Localizada a más de 200 km
Tras emitir alertas a distintos despachos policiales de Córdoba, a las 02:10 la Policía Caminera logró interceptar el auto antes de llegar a Isla Verde. La menor fue resguardada y se notificó inmediatamente a Fiscalía.
La causa continúa en manos de la Comisaría 1ª de San Lorenzo, que seguirá adelante con las actuaciones correspondientes.
Un caso que expone nuevamente los riesgos en torno al uso de aplicaciones de transporte por menores, los viajes interprovinciales sin control y la rapidez con la que una situación cotidiana puede transformarse en una emergencia.






