La industria aceitera lleva 48 horas. Un día más sin poder trabajar normalmente en toda la industria y sin interés de los líderes sindicales de volver a la mesa de negociación.
Evitar una negociación paritaria solo generará menores salarios a la comunidad aceitera porque se les descontarán todos los días. Es incomprensible que rechacen un aumento muy superior a la inflación esperada y corten todo diálogo. Miles de transportistas han perdido días de trabajo y el país pierde credibilidad como proveedor de alimentos ante estas medidas sin sentido.
La propuesta de la industria anticipa inflación y deja a los salarios aceiteros por encima de la mayoría de las actividades económicas en el país. La continuidad del paro está en manos de los sindicatos. La industria ya hizo todo su esfuerzo.