El 10 de diciembre de 2009, los concejales de San Lorenzo decidieron no habilitar a Pedro “Pili” Rodriguez para que asuma como concejal luego de haber ganado su banca en la elección intermedia de ese mismo año. La dirigente que encabezó el proyecto de resolución fue la ex concejal Marcela Lozano, quien logró que otros cienco ediles la acompañen para sentenciar así el fin de la carrera política del abogado sanlorencino.
La “inhabilidad moral” que menciona el art. 66 de la Constitución Nacional es alternativa a “inhabilidad física” y, por ende, conforme a la terminología de la época, está referida a lo que hoy se denomina “inhabilidad mental o psíquica”, se trata de las viejas “facultades del alma” o “del espíritu”, es decir, “facultades morales” con las que la psiquiatría precientífica hacía referencia al correcto ejercicio del juicio crítico como síntesis adecuada de la actividad consciente (Voto del Dr. E. Raúl Zaffaroni)”, este fue el sumario del fallo de la corte suprema de Justicia de la Nación que dejó firme la expulsión del represor Antonio Bussi de la Cámara de Diputados de la Nación.
Esteban Aricó, el año pasado montó una de las campañas electorales más opulentas de la que se tenga memoria. Muchos entendían que el multimillonario financiamiento podía ser de un empresario enojado con el intendente actual, algo que se fue descartando por la características propias de este hombre de negocios sanlorencino. Con el correr de la campaña electoral, que tenía a Aricó como candidato a intendente por el espacio del ex gobernador Omar Perotti, se empezó a comprender el origen de los fondos estimados en más de 700 mil dólares.
El equipo de campaña de Esteban Aricó, desde un año antes de lanzar su candidatura a intendente, ofrecía a los medios de comunicación locales dinero en efectivo a través de sobres. Y con impunidad, uno de sus colaboradores contaba cuál iba a ser la mecánica para obtener los fondos para repartir “todo este dinero baja de la provincia como ayudas sociales a través de organizaciones intermedias”, esta reunión sucedió en agosto de 2022. La ONG Protegiendo Sueños, engranaje legal para fundar un comedor fantasma y así quedarse con la plata de la comida comenzó a funcionar como “comedor” dos meses después de que esta reunión se produjo en una estación de servicio de San Lorenzo.
El programa provincial de asistencia a Comedores Comunitarios por el cual la ONG Protegiendo Sueños debía montar un comedor social tenía la misión de alimentar a más de 200 chicos de edad temprana, la alimentación en esta etapa de la vida son clave para el desarrollo intelectual de los niños, porque son aquellos que no pueden acceder a valores nutricionales y quedan condenados de por vida. Esto, independientemente de la tipificación penal que tenga el caso, rozaría un delito de Lesa Humanidad por haber tenido un plan del estado para robarse el alimento destinado a menores de edad que deben constituir el futuro de una ciudad.
Entonces, como en aquella situación de 2009, hoy los concejales de la ciudad de San Lorenzo deberían salir del espacio de comodidad que les brinda ser oficialistas, sacar el foco de las redes sociales y poner más coraje contra las “inmoralidades” en el recinto de sesiones. Tienen sobre la mesa todas las pruebas para dar un ejemplo histórico que permita limpiar de la política a los perversos que son capaces de meterse con el alimento, en un país que tiene al 40% de sus menores de edad con deficiencias nutricionales. A los inmorales, ni olvido, ni perdón!
