Por Bernardo Basombrio
Con la presencia de tres de los máximos directores de Vicentín, Estanislao Bougain, Daniel Foschiatti y, Carlos Sartor –quien ejerce la suplencia de Omar Scarel-, se llevó a cabo una reunión de intercambio informativo con los trabajadores y, los representantes del sindicato aceitero dentro del complejo fabril de Avellaneda, al norte de Santa Fe. Todo el contenido fue en relación a la incumbencia de la marcha en esta localidad.
Con la asistencia total de cerca de 100 empleados sobre un conjunto de 211 que tiene este nodo norte, y con que la compañía completa sus establecimientos en San Lorenzo, Timbúes y Ricardone, en la mañana de hoy tuvo comienzo el encuentro a la hora acordada, puntualmente.
Estanislao Bougain tomó la palabra y explicó el presente y el futuro de la aceitera, flanqueado por los directores. El primer aspecto que trató, apuntó a despejar la incertidumbre laboral. “Al homologar la proclamación de la existencia del Acuerdo alcanzado con los acreedores, el juez da curso de autorización a la ejecución inmediata de los alcances allí establecidos”.
Mientras, dos factores cargan con presión sobre los tiempos del Juez: los fazones en curso con los socios estratégicos que finalizan el 31 de julio próximo se asiste, en paralelo, a una escasez de granos -que además tienen baja calidad- debido a la sequía que azotó la última campaña.
Al desarrollar, hizo saber que los socios estratégicos se harán cargo de sostener económicamente al nodo norte los 18 meses posteriores al acto, de un plazo que inicialmente era de 6 meses-. Esa extensión está fundada en que los nuevos dueños requieren ese tiempo para un conocimiento del lugar y su manejo para mayor asiento sobre la cultura con que se desenvuelve la empresa.
A su vez, hizo saber que: “Todo es importante que funcione; el norte no es prescindible”.
En tal sentido, el Banco Nación y según la Ley de Concursos, como también los acreedores que no suscribieron deberán acordar individualmente la reestructuración de su acreencia ante el juzgado. De tal modo y respecto a la planta de bioetanol, puntualmente, se deberá desarrollar un acuerdo con el banco, para su funcionamiento.
Además de recordar que el flujo de fondos necesita de los estratégicos para un futuro próximo, Bougain no imagina otro escenario de certezas. Al momento de las preguntas, Leandro Monzón, secretario del Sindicato de Aceiteros local –como también otros empleados no sindicalizados hicieron saber sus dudas e inquietudes a las autoridades de la empresa.
La tensión inicial del ambiente fue disipándose a medida que la información bajaba, girando a cordial. Particularmente hubo un giro gestual al entender la necesidad de homologar versus cramdown; Monzón no parecía saber la diferencia. Esa distinción fue muy bien recibida de las explicaciones que Bougain supo dar.
El Juez Fabián Lorenzini, tiene en sus manos la decisión final de homologar o no y, que es aguardada con premura. El concurso alcanzó la aceptación del 62,93% de acreedores y del 71,73% de capital. Los acreedores que presentaron impugnaciones son cuatro del sector público: Banco Nación, Banco Provincia de Buenos Aires, BICE y AFIP, y del privado, Commodities.
El fundamento de esa disidencia la centran en la Pars Conditio Creditorum como de bien público. Alegan no recibir, todos, la misma cantidad de dinero; por lo que unos reciben el 100 % y otros el 10%, debido a que la empresa eligió no categorizar a los acreedores y dispensando el mismo trato al conjunto.
En esta dura puja –harto politizada- está la bala de plata que sólo el magistrado entiende emanada de la propuesta concursal que avaló: resguardar a los acreedores de menor escala frente a esos 5 sobre 1699 del total. La jurisprudencia tiene largos antecedentes en tal sentido. La Ley las mayorías que exige y, son holgadas.
