El rendimiento esperado del maíz tardío en la región núcleo ha sufrido un fuerte golpe, disminuyendo en un 30% debido a la presencia del Spiroplasma, una enfermedad transmitida por la chicharrita. Anticipado inicialmente entre 85 y 90 quintales por hectárea, el rendimiento ahora se estima alrededor de los 60 quintales por hectárea. La preocupación persiste ya que el daño podría agravarse a medida que avanza el ciclo del cultivo, con síntomas más evidentes semana tras semana.
El impacto del Spiroplasma varía según la región: mientras algunos sectores enfrentan pérdidas totales de lotes, otros registran solo un 5% de daño. En el centro-sur de Santa Fe, aproximadamente el 80% de las áreas sembradas con maíz tardío han sido afectadas, con la pérdida total de algunos lotes. En áreas como Venado Tuerto, Pergamino y Marcos Juárez, las mermas oscilan entre el 10% y el 30%. Esta situación plantea incertidumbres sobre el futuro de la siembra de maíz tardío para el ciclo 2024/25, ya que los productores y agrónomos temen una caída significativa en las siembras debido a la falta de garantías de productividad y medidas de control efectivas en el mercado.
Casi el 50% del maíz temprano se cosechó en los últimos 15 días
Mientras tanto, la cosecha de maíz temprano ha avanzado rápidamente en las últimas dos semanas, cubriendo casi el 65% del área sembrada con rendimientos promedio que alcanzan los 108 quintales por hectárea. Aunque existen variaciones regionales, con rendimientos que van desde los 80 hasta los 150 quintales por hectárea, el sur de Santa Fe lidera la trilla con un avance del 83% y rendimientos que oscilan entre los 80 y 125 quintales por hectárea. Sin embargo, aún queda un 35% del área por cosechar.
Soja de 1ra: fuerte avance de la cosecha con 44 qq/ha de promedio, pero con serias dificultades por retención de hojas
Por otro lado, la cosecha de soja de primera también avanza, cubriendo el 43% del área sembrada con un rendimiento promedio de 44 quintales por hectárea. Sin embargo, se enfrentan serias dificultades debido a la retención de hojas, especialmente en el centro-sur de Santa Fe, donde solo se ha recolectado el 28% de la superficie debido a estos problemas. A pesar de los desafíos, se espera que la cosecha continúe progresando en las próximas semanas.
