El pasado viernes, el secretario general del Sindicato de Camioneros de Santa Fe, Sergio Aladio, recibió la primera dosis de la vacuna anticovid.
La noticia no tendría mayor relevancia si no fuera que algunos de sus pares, como el referente de los Empleados de Comercio, o funcionarios políticos, como el actual intendente de Granadero Baigorria, Adrián Maglia, lo hicieron con bastante anterioridad pasando por un “vacunatorio VIP” instalado en el hospital Eva Perón.
En el caso de Aladio, esperó su turno y se vacunó. De tal manera, y sólo cumpliendo con el protocolo en vigencia se diferenció de la dirigencia nacional del gremio, donde Hugo Moyano también se benefició con las dosis que otrora estaban reservadas al personal sanitario.
“No hacen falta privilegios, sólo hace falta sentido común”, respondió Aladio tras la consulta de rigor.
Moyano fue uno de los primeros señalados como vacunados VIP, y lejos de negarlo, lo reconoció argumentando que tenía tal derecho porque estaba al frente de la obra social d esu gremio. Una explicación tan absurda como vergonzosa.
Para el caso de la región, también vale recordar que otro de los privilegiados es el intendente de Granadero Baigorria, Adrián Maglia, quien también salió a dar explicaciones que roza lo absurdo.
Tanto Moyano como Maglia siguen en sus cargos como si nada de todo eso hubiera ocurrido.
